jueves, octubre 04, 2007

Los incas engordaban a los niños antes de su sacrificio

Reconozco que la mayoría de las noticias que encuentro ojeando la prensa son de El Mundo, pero ayer me quede atónita con uno de sus titulares, el que enlace a la sección correspondiente, toda una lección de periodismo "sensacionalista":

Reconozco que me gusta mucho que en "El Mundo" las noticias relacionadas con la Arqueología, sean incluidas en el apartado de "Ciencia".... está muy bien, pero con esta frasecilla se han pasado un pelo. No se ajusta al contenido de la noticia, a parte del uso del entrecomillado, da la sensación de que los incas escogían a los niños que estaban más gordos, cual bruja de la "Casita de Chocolate", para sacrificarlos. Si luego se lee la noticia, los niños eran engordados a posteriori.

La puedes encontrar completa en: El Mundo

A partir del análisis de los cabellos de las momias, una investigación descubre que los Incas "engordaban" a los niños antes de sacrificarlos.

Un equipo internacional e interdisciplinar formado por 13
investigadores han analizado los restos de cuatro momias
halladas en las cumbres de las grandes montañas de los Andes. La
espeluznante conclusión a la que han llegado es que los niños
antes de ser sacrificados eran 'engordados'. Los resultados de
la investigación han sido publicados en la revista 'Proceedings
of the National Academy of Sciences' (PNAS).

El propósito de la investigación era descubrir el origen,
estatus y modo de vida de los niños y jóvenes sacrificados
ritualmente. Para ello se analizaron cuatro momias analizadas
halladas en dos yacimientos arqueológicos descubiertos en la
década de 1990 en la cordillera de los Andes, y situados a una
gran altura. En concreto, se trata de una niña de 15 años
encontrada en el volcán 'Sara Sara' (Perú) de 5.500 metros de
altura, y de tres niños de 15, 7 y 6 años encontrados en el
volcán Llullaillaco (Argentina) de 6.700 metros. Estos
yacimientos, con otros de los Andes, también incaicos, son los
que se encuentran a mayor altura en el planeta.

Las momias tenían consigo saquitos con su propio pelo que habría
sido cortado seis meses antes del sacrificio. El análisis y
comparación de los cabellos ha revelado que, desde su
designación como 'objetos para el sacrificio', su dieta se vio
muy enriquecida, incorporando productos como la carne, ausentes
en la alimentación de los campesinos. Así pues, los niños fueron
'engordados' antes de ser asesinados.

Los datos históricos y arqueológicos revelan que los niños
llegaron a estas cimas desde lugares lejanos del imperio. Es
posible que primero fueran a la capital, Cuzco, y posteriormente
les trasladaran a las montañas, donde eran sacrificados. Según
indican los investigadores, los españoles observaron que los
nobles enviaban a sus propios hijos al sacrificio; pero las
comunidades locales también hacían su contribución a este
tributo de sangre.

Los investigadores no saben exactamente cómo murieron todos los
niños, pero al menos uno falleció por un golpe en la cabeza.
Según Timothy Taylor, investigador de la Universidad de
Bradford, en declaraciones a Reuters, "nos parece que fueron
conducidos a la sepultura en la cumbre, en la culminación de un
rito de un año, fueron drogados y luego abandonados para
sucumbir por la exposición a las condiciones extremas".